viernes, 19 de febrero de 2010

CUANDO SE OLVIDE EL TERREMOTO, SE TERMINEN LAS AYUDAS Y DISMINUYA LA INTERVENCION MILITAR DIRECTA DE EE.UU, HACIA DONDE SE ENCAMINARÁ LA SOC. HAITIANA

Cuando se olvide el terremoto, se terminen las ayudas y disminuya la intervención militar directa de EE.UU. ¿hacia donde se encaminará la sociedad Haitiana?

Para Haiti recuperarse del terremoto que los afectó, necesita romper muchos tabúes. Es cierto que Haiti tiene problemas de deforestación, de producción agrícola, exceso de población, falta de trabajo, analfabetismo, carencia de un sistema de salud, pocas vías de comunicación, ausencia de servicios básicos, etc, etc. pero, el problema mayor de la población haitiana, es su conformismo con el estado de atraso en que viven, originado en una condición mental a la que se han acostumbrado, cuya insistencia regresional al pasado no le permite organizarse en el presente para luchar por un futuro mejor, desarrollo que no dependa de las dadivas externas, ni de la mendicidad internacional para reparar los daños a que fueron sometidos por los franceses, daños, maltratos y explotación, los que cambiaron muy poco en Haiti a partir de 1804.

No son solos los sectores más marginados de esa nación los que deben cambiar, es toda la sociedad haitiana, los negros, los mulatos y los haitianos de origen árabe.

Haiti necesita de un largo fideicomiso, que le permita cambiar su mentalidad actual frente al desarrollo, la democracia y las obligaciones y derechos de todos los haitianos, ricos y pobres, hombres y mujeres, ancianos y niños.

La comunidad internacional está en el deber y la obligación de ayudar a Haiti a desarrollarse económica y socialmente, pero ese desarrollo no lo podrán realizar jamás, sin la colaboración espontánea, sincera y real de los haitianos, los que al no confiar en la instituciones , ni en el Estado Haitiano prefieren tener sus ahorros fuera de Haiti; ahorros y depósitos que según afirma el Senador haitiano Rudolph, Henry Baulus ascienden 200,000 millones de dólares, dinero más que suficiente para hacer de Haiti un Estado modelo de desarrollo en el Caribe.

Naturalmente, mientras todo esto puede suceder a corto plazo en Haiti, lo único que podemos hacer por ahora los dominicanos es, rezar para no tener que asumir la organización y el desarrollo de Haiti, por vía de una fusión no deseada e imposible para una nación como la nuestra, con muchos problemas también por resolver.
La comunidad internacional debe entender, que el fideicomiso prolongado es la única posible solución al problema haitiano de hoy.

No hay comentarios: